Bucha se ha convertido en el símbolo de la barbarie. Tras ser liberada, y una vez ha podido acceder el ejército ucraniano tras la marcha de los soldados de Putin, se ha descubierto una auténtica matanza de civiles. Cuerpos maniatados tirados por las calles y cadáveres con signos de tortura es lo que se han encontrado al entrar en la ciudad, que ha estado sitiada. Ya se han recuperado los cuerpos de más de 400 personas.
Sin embargo los cadáveres de numerosas tumbas improvisadas en toda la ciudad aún deben ser exhumados, por lo que la cifra de víctimas se espera mucho mayor.
La última noticia que se ha conocido al respecto es que se han hallado al menos cinco muertos en el sótano de un hospital infantil con signos aparentes de tortura. Según ha informado la Oficina del Fiscal General de Ucrania, la policía ha encontrado los cuerpos de cinco hombres con las manos atadas, a los que «los militares rusos torturaron».
En este sentido, en el comunicado, la Oficina del Fiscal General ha asegurado que «se están tomando medidas para establecer las circunstancias de cada crimen de guerra y los involucrados en la agresión rusa para llevarlos ante la justicia».
Según ha informado este lunes la Fiscal General ucraniana, Iryna Venediktova, las fuerzas rusas han cometido más de 7.000 crímenes de guerra desde que comenzó la invasión rusa a Ucrania.
Por su parte, el presidente Zelenski que ayer acudió a Bucha a comprobar personalmente el horror, intervendrá hoy martes de tarde por video conferencia ante el Congreso de los Diputados.