Una masa de aire frío, procedente del Ártico, es la responsable del desplome de temperaturas en Galicia que comenzó el jueves, continúa este viernes y seguirá durante el fin de semana.
Hoy hemos amanecido con muchas poblaciones en temperaturas bajo cero o de apenas uno o dos grados positivos. A Veiga, en la provincia de Ourense, marcó la mínima de Galicia con ocho grados bajo cero, si bien es verdad que en una cota superior a 900 metros de altitud donde se encuentra la estación meteorológica de Xares. Ocurrió igual en la estación invernal de Cabeza de Manzaneda donde se llegaron a alcanzar siete grados bajo cero.
En cotas inferiores, la temperatura más baja la marcó al amanecer el concello ourensano de Calvos de Randín con tres grados bajo cero. Y en la provincia de Pontevedra, Lalín, en la estación de Mouriscade donde se midieron casi dos grados bajo cero.
En poblaciones de la costa y en la franja litoral, aunque las temperaturas no han sido tan bajas, la sensación térmica era esta mañana de muy pocos grados sobre cero como ocurrió en Pontevedra, Marín, Baiona o Vilanova de Arousa.