Volver a las playas en Galicia a partir de hoy, con el estreno de la fase 2 del Plan de Desescalada, será reconfortante pero también una experiencia nueva. Tendremos que adaptarnos a la nuevas normas y aprender a estar en los arenales de una manera diferente a la habitual puesto que el Gobierno ha impuesto ciertas medidas para evitar el contagio por coronavirus entre los miles de usuarios que llenarán las playas, aguijoneados por una semana de calor.

El sábado, el Boletín Oficial del Estado publicó un protocolo general aunque deja a los ayuntamientos la autonomía de decidir límites de aforo, tiempo y control de los bañistas. 

Los ayuntamientos tendrán que encargarse de que no se sobrepase el aforo máximo permitido. La recomendación del BOE,  es que cada bañista ocupe aproximadamente cuatro metros cuadrados».

Se permite el uso de duchas y lavapiés al aire libre, aseos, vestuarios y otros servicios públicos similares. Su ocupación máxima será de una persona, salvo en aquellos supuestos de personas que puedan precisar asistencia, en cuyo caso podrán contar con su acompañante. Para garantizar la seguridad, deberá reforzarse la limpieza y desinfección de estos.

Por cierto ayer en la conferencia de presidentes autonómicos con Pedro Sánchez, Feijóo pidió respecto a la cuestión de las playas, aclarar las medidas publicadas en el BOE, porque establecer un mínimo de seis metros sobre la pleamar es una limitación muy grande para una buena parte de los arenales gallegos, donde las mareas presentan oscilaciones muy grandes.