Un centenar de establecimientos de hostelería, mayoritariamente del centro histórico, realizaron ayer un cierre  para denunciar la muerte por asfixia que las tres administraciones -Gobierno Central, Xunta de Galicia y Concello de Pontevedra- están propiciando con sus respectivas medidas ante la pandemia que criminalizan, sobre todo a este sector.

https://fb.watch/1xCzCsR5oW/

El malestar de cientos de autónomos, propietarios y empleados se tradujo en una sonora cacerolada que fue participada por muchos más establecimientos a lo largo del ensanche y otras zonas de la ciudad. Se trata de una primera movilización que se seguirá con otras y además con el empleo de las redes sociales para trasladar sus reclamaciones.

Precisamente anoche también comenzó a circular con muchísimas reproducciones este vídeo sobre los efectos del cierre al tráfico de Reina Victoria y sus consecuencias en otros viales de la ciudad de Pontevedra.

https://fb.watch/1xCv6hCJMK/