El Gobierno Central, a través de la Subdelegación de Pontevedra, informó que el vertido de carburante a la ría de Arousa ya está eliminado al tiempo que se ha podido establecer el origen del mismo.
La subdelegada, Maica Larriba, ha asegurado que «todas las manchas han sido eliminadas» por los medios marítimos que han trabajado en la zona, mediante la aspiración del hidrocarburo que quedaba en superficie y el despliegue de barreras anticontaminación que impidieron la expansión de la mancha.
En cuanto al origen, la subdelegada informó que el foco posible es un escape de fuel a través del esmisario submarino de Touro. Abundando en esta versión el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma), ha confirmado que el origen del vertido está en «un emisario submarino, con origen en Punta Touro, de unos 3,5 kilómetros de longitud y a unos 50 metros de profundidad».