El sistema de cita previa para ir a la playa propuesto por la Xunta de Galicia a los alcaldes de los municipios costeros de la comunidad, es rechazado por la generalidad de los munícipes. El problema es que no hay alternativas claras para controlar lo que muchos de los regidores se ven venir: una avalancha de bañistas.
Los alcaldes han descartado el sistema QR de cita previa para ir a la playa por la imposibilidad de aplicarlo a la mayoría de los arenales gallegos, según se concluyó ayer en la reunión por video conferencia que mantuvieron el presidente de la Federación Galega de Municipios e Provincias (Fegamp), el socialista Alberto Varela, con los conselleiros de Cultura e Turismo, Román Rodríguez, y de Medio Ambiente, Ángeles Vázquez.
Las principales pegas son: como se controla el aforo y los costes que conllevaría en incremento de personal para las playas su aplicación.
De la reunión se concluyó que tampoco hay alternativas a los problemas con los que se encuentran los concellos costeros para cubrir los costes del personal que necesitan para el mantenimiento y vigilancia de los arenales. Ya en los últimos años, algún ayuntamiento renunció a las banderas azules por no poder costear los socorristas o el personal de limpieza, a lo que este verano se suma la necesidad de controlar los aforos por el coronavirus.
