El Índice de Precios de Consumo (IPC) continuó su escalada en septiembre en Galicia, debido al efecto de arrastre de los precios de la energía (electricidad y gas, sobre todo) que han empujado a que la carestía subiera más de un cuatro por ciento, exactamente 4,6% en relación al mismo mes del año anterior. Es decir, en Galicia los precios son aún más caros que en el resto de España (la media estatal del IPC es 4%).

De este modo, los precios gallegos alcanzan niveles de incremento que no se registraban desde hace 13 años, cuando estalló la crisis económica en septiembre de 2008.

Entre los segmentos económicos que experimentan mayor alza de precios figuran vivienda (+17 %). Le sigue el transporte (+10%), vestido y calzado (+5%).