La corporación municipal de Porriño guardó esta noche un minuto de silencio por el convecino Sergio Fernández, asesinado en Méjico, al ser tiroteado en un intento de robo de su coche en colonia Las Huertas, en la ciudad de Naucalpan donde residía.

El alcalde de O Porriño, Alejandro Lorenzo, ha expresado que los vecinos del municipio se encuentran «apenados» por la muerte de una persona «muy conocida» que «tenía muchos amigos aquí». Destacó que tenía un «palmarés muy importante» como culturista, además de haber trabajado como entrenador personal y montar su propio gimnasio en México. Sergio tenía pareja y un hijo de corta edad.

El regidor trasladó las condolencias del Concello a la familia de la víctima, cuyos padres residen en este municipio.

El Ayuntamiento de O Porriño ha colocado las banderas a media asta en señal de luto.