El nuevo banco resultante de la fusión de la Caixa y de Bankia será el primer banco del país por tamaño. Un gigante con más de 650.000 millones de euros en activos, un valor en bolsa de unos 16.000 millones, más de 51.000 empleados y de 6.700 sucursales, y un beneficio conjunto de 340 millones en el primer semestre del año.
Como todas las fusiones bancarias luego llegará el momento de adelgazar el tamaño de la entidad resultante. Téngase en cuenta que Bankia tiene actualmente 128 empleados en Galicia) mientras que CaixaBank tiene una plantilla mucho mayor en las cuatro provincias con un total de 633 trabajadores.
Por el reparto de puestos directivos en el futuro consejo de administración se deduce que estamos ante una absorción en la que la posición dominante corrresponde a la entidad catalana.
Las negociaciones de los últimos días también han servido para afianzar la idea inicial de que el domicilio social del nuevo banco esté en Valencia, aunque mantenga sedes operativas en Barcelona y Madrid, y la de que sea la marca CaixaBank la que se imponga.