España, de momento, parece resistir el embate de una cuarta ola de la pandemia que ya se evidencia en algunos países vecinos como Francia.
En Francia se ha iniciado un confinamiento con cierre de comercios no esenciales que afecta a un tercio de la población del país, con especial preocupación por la situación en París y en la zona de la nación gala.
Con semejante estado de cosas, no deja de resultar chocante e irritante la cantidad de turistas franceses, sobre gente muy joven, que está viajando a Madrid para estar de fiesta en nuestro país con todo aquello que no se les permite en el suyo.
En otros dos países de nuestro entorno, Alemania e Italia, también se ha constatado un disparo de positivos que se identifica con una cuarta ola.
Ante esta situación, hay expertos que auguran que también habrá un arreón de contagios en España, después de haber bajado la incidencia en los últimos 60 días.
La clave será como salgamos de este puente de San José y sobre todo de la Semana Santa.
Existe inquietud porque ya hay indicadores de que vuelven a subir los contagios en varias comunidades autónomas.