La Xunta de Galicia, a través de las Consellerías de Sanidade y de Política Social ha admitido que un jubilado de 87 años fallecido en el Hospital Universitario de Santiago, que procedía de la residencia Coviastec de Silleda (Pontevedra), estaba completamente vacunado, con las dos dosis, y a pesar de ello murió.

Ese matiz es el que hace especialmente importante este deceso. La explicación de la Xunta es que sobrevino un problema cardiovascular». Problema cardiovascular que el Gobierno no aclara si estaba directamente relacionado con el covid o era un problema precedente.

El SERGAS sí especifica que contaba con patologías previas, que no detalla, según informó la agencia Galiciapress.

Ocurre que en esa residencia geriátrica de Silleda se detectaba un brote de coronavirus que ya ha alcanzado a 46 residentes.