Los crecientes ingresos de pacientes por coronavirus han obligado a los hospitales de Santiago, Coruña y Ferrol a reprogramar y retrasar cirugías no urgentes, con el objetivo de dejar camas libres para posibles ingresos.

Ya se han reprogramado intervenciones no urgentes, sin «riesgo vital», por lo que están totalmente garantizadas las operaciones de urgencias y del ámbito oncológico.

Los aplazamientos afectan a operaciones no urgentes que, en su postoperatorio pueden requerir el uso de camas de críticos. Con ello, se garantiza que estas camas estén disponibles en la medida de lo posible por si fuesen necesarias para pacientes covid.